Actualmente la pena mínima por un homicidio intencional es de dos años. El Ministerio del Interior había propuesto en primera instancia llevarlo a seis años.
El ministro del Interior, Luis Alberto Heber, anunció este miércoles un cambio en su propuesta de aumentar las penas mínimas para el delito de homicidio intencional. La norma actualmente prevé una mínima de dos años de prisión y el gobierno propuso en la Rendición de Cuentas llevarla a seis, pero ante las críticas de abogados penalistas y fiscales, la cartera decidió bajarlo a cuatro.
¿Por qué este cambio atiende las críticas de los profesionales del tema? Porque el código del proceso penal establece que los delitos que tienen mínimas superiores a cuatro años de prisión no se pueden tratar bajo régimen de proceso abreviado. Si la pena mínima pasa a seis años, solo se podrá obtener condena mediante juicio, lo que llevaría mucho más tiempo y, según abogados y fiscales, más homicidas en libertad y sin condena.
«Fíjese que un homicidio intencional, uno mata a otra persona con intención, tiene como mínimo dos años. ¡Dos años! Notoriamente es insuficiente. Propusimos seis. Con los seis parecería que estamos llevando a una situación que no se da el acuerdo abreviado, no es nuestra intención eliminar la posibilidad del acuerdo abreviado. Estamos dispuestos de bajarlo a cuatro, pero no a dos. Parece increíble que eso esté en nuestro código», dijo Heber a la prensa luego de comparecer ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados.
Cuando la propuesta se presentó, uno de los actores que se manifestó en contra fue el fiscal de Homicidios Carlos Negro. «Los homicidios son de los delitos donde más resistencia a declarar sienten los testigos. Hacerlos transitar el juicio -cuando se logran penas muy razonables en abreviados- se traduce en ausencia de prueba. ¿Quién gana al final del día? La amenaza, la violencia y la impunidad. Los niveles de condenas (hoy ya bajos) caerán inexorablemente y la cantidad de crímenes violentos seguirá sin darse cuenta de cambios puramente normativos», argumentó en su cuenta de Twitter.
Un argumento similar empleó el presidente de la Asociación de Abogados Penalistas del Uruguay, Juan Fagúndez. Con el nuevo sistema «habría menos condenados por homicidios y más homicidas libres», dijo a Telemundo, y añadió: «Llevar el mínimo a seis años parece exagerado y fuera de los principios y la tradición uruguaya de no volverse un estado castigador a ese nivel».
Fuente: Teledoce