El hombre de 57 años fue enviado a prisión preventiva por 120 días; la mujer se recupera luego de haber sido hallada este lunes en su vivienda de Rivera, encerrada y con quemaduras graves.
La Justicia imputó al hombre de 57 años, pareja de la mujer de 61 que el lunes fue hallada en su vivienda de Rivera, encerrada y con quemaduras de segundo grado en cara, pecho, senos y brazos.
Fuentes de la Fiscalía informaron a Subrayado que el hombre fue imputado por un delito continuado de violencia doméstica agravado, homicidio especialmente agravado por femicidio en grado de tentativa y violencia privada. El homicidio es agravado por su parentesco con la víctima, además del intento de femicidio.
La Justicia dispuso que sea enviado a prisión preventiva por 120 días mientras la Fiscalía continúa la investigación. Aguardará en la cárcel una sentencia definitiva. Estaba detenido desde el lunes en la seccional 1ª de Rivera.
«Ella estaba privada de su libertad, no podía salir. En esas condiciones había un riesgo de vida por una infección generalizada», dijo la fiscal Alejandra Domínguez. Informó que había denuncias de violencia doméstica en la pareja.
En tanto, la víctima se recupera de las heridas en el Centro Nacional de Quemados (Cenaque). Subrayado informó entonces que la mujer fue hallada dentro de su vivienda con quemaduras graves, y el portón estaba trancado con candado, por fuera. La Policía la rescató el lunes sobre la hora 11:00 y la trasladó al hospital local.
La víctima vive con su pareja –el ahora imputado– en esa vivienda del barrio Insausti. Los médicos indicaron que la mujer tiene quemaduras de segundo grado, de una semana de evolución.
La Policía halló a la mujer dentro de la vivienda luego de recibir una llamada de una persona que indicaba que la víctima estaba encerrada y siendo maltratada por su pareja.
Cuando los policías llegaron a la vivienda, en principio la mujer no se mostraba, y contestaba a través de una cortina. Preguntó quién había llamado a la Policía, diciendo que ella no lo había hecho y afirmando que se encontraba bien. Contó que estaba sola en su casa, y que su pareja se había ido a trabajar.
Los efectivos se quedaron en el lugar por varios minutos, y observaron que un portón del costado de la vivienda era el único acceso al predio. Estaba trancado con candado, del lado de afuera, por lo que la víctima tenía impedida la salida.
Tras un diálogo de varios minutos, los policías convencieron a la mujer, quien mostró su cara. Tenía quemaduras en gran parte del rostro, como también en pecho, brazos y senos. Fueron solicitados médicos al lugar, pese a que ella decía que no saldría de la vivienda sin el consentimiento de su pareja, que no estaba en el lugar, consta de la información policial a la que accedió Subrayado.
La argumentó a los policías que se quemó ella misma tratando de prender el fogón de su casa, y afirmó que su pareja no tenía que ver con lo sucedido.
En un momento tiró una llave por la ventana, con la que los policías pudieron abrir el portón.
Cuando la Policía se encontraba en la vivienda, dos vecinos se acercaron para comentar que la mujer es víctima de violencia doméstica, y que se los escuchaba discutir con frecuencia.
Fuente: Subrayado