El objetivo principal del proyecto «es terminar con la inseguridad actual en la continuidad de la producción, bombeo, aducción y abastecimiento público de agua potable para la región metropolitana».

OSE emitió un comunicado a la población con detalles sobre el proyecto Arazatí luego que se concretara este jueves la firma entre el gobierno y el consorcio Aguas de Montevideo para el inicio de la construcción de la planta potabilizadora de agua en San José.
«Este proyecto, cuyo contrato fuera aprobado por el Tribunal de Cuentas y además tiene la autorización ambiental previa del Ministerio de Ambiente, constituye el mayor emprendimiento de construcción de infraestructura de agua potable de los últimos 150 años», subrayó la empresa estatal a cargo de la firma del contrato.
Además, recalcó que el mismo «garantizará la producción y el suministro público de agua potable a la región metropolitana, cubriendo su demanda proyectada hasta el año 2045». La obra, agregó, permitirá adicionar 200.000 metros cúbicos diarios a los 700.000 que produce en promedio actualmente la Usina de Aguas Corrientes.
«La operación en forma continua de Arazatí permitirá la preservación de las reservas de la represa de Paso Severino, y además asegurará el abastecimiento público en casos de emergencia extrema», aseveró la empresa estatal. «En una situación de esa magnitud, los 200.000 metros cúbicos diarios que producirá, permitirán abastecer de agua potable a los 1.750.000 habitantes de la Región Metropolitana, con una dotación entre 80 y 110 litros por persona», detalló.
OSE afirmó que la planta contará con la tecnología más moderna del mundo. «Esa tecnología es apta para controlar y reducir riesgos biológicos, como cianobacterias, y riesgos físico-químicos», indicó.
«El modelo de financiamiento adoptado para Arazatí responde al resultado de un análisis macroeconómico en línea con los mecanismos de financiación privada utilizados anteriormente para grandes obras de infraestructura en el país, que no hubieran sido posible construir sin aplicar esos conceptos», informó.
El objetivo principal de Arazatí «es terminar con la inseguridad actual en la continuidad de la producción, bombeo, aducción y abastecimiento público de agua potable para la región metropolitana, que se encuentra, por virtud de esa unicidad de las partes, en constante amenaza de una tragedia», subrayó.
«Esto se debe a la ausencia total de respaldo en caso de que alguna de las partes señaladas colapse: una única fuente (Río Santa Lucía), una única planta potabilizadora (Aguas Corrientes) y un único sistema de aducción y bombeo (líneas actuales)», cerró.
Fuente: Teledoce