Hay recambios en todas las categorías y varios retornos a los tablados que después de años generan expectativa.

Por Diego Castro
La noche cálida, el mediotanque con mucha madera y fuego, una cerveza fría y el coro de una murga de fondo haciendo retoques para sus espectáculos que en apenas cinco días comenzarán a rodar por todo Montevideo.
La escena se repite en varios rincones de Montevideo, donde 39 agrupaciones se preparan para competir en cinco categorías por la gloria eterna de ser reconocidos como los mejores. Claro, el interior también existe y tres agrupaciones más se preparan en Mercedes, San Carlos y San José para participar del certamen en el Teatro de Verano.
La recorrida
Uno de los pocos lugares donde no hay cantina al público es el Espacio Velódromo, ubicado precisamente dentro del predio del velódromo, donde por ser un local de la Intendencia de Montevideo no se pueden vender bebidas ni alimentos. “Ahí estuvimos en desventaja”, señaló Daniel Carluccio, director responsable de Curtidores de Hongos, que ensayó para el carnaval en ese local.
Sin embargo, el propio Carluccio comenta que al conjunto le va bien con la gente en ese lugar. “Ayer tuvimos que traer más sillas porque la gente no entraba”, dijo respecto a su penúltimo ensayo público antes del fin de semana previo a Carnaval.
Los ajustes están a la orden del día en todas las agrupaciones. Diego Berardi, director escénico de La Nueva Milonga, señaló que “para la altura del año que estamos, estamos muy bien”, dijo a pocos días de iniciarse el Carnaval, aunque luego confesó: “Todavía estamos haciendo arreglos”.
Freddy González, uno de los letristas de Curtidores de Hongos, afirmó que “el espectáculo está, solo hay que empezar a ponerlo en rodaje y ahí, seguro van a haber varias modificaciones”.
En Sutel se prepara para el concurso Doña Bastarda, que una semana antes del certamen continuaba con detalles de la puesta en escena, aunque afirman que el espectáculo está pronto y ya rodando en varios festivales.
Idas y vueltas
Este carnaval, como casi todos, muestra recambios de varios planteles en todas las categorías. Dentro de los más destacados está la vuelta a los escenarios de Luis Alberto Carballo, en conjunto con el regreso de una de las agrupaciones históricas del parodismo: los Adam’s. “Volví al carnaval porque era en Adam’s”, dijo el mismo Carballo, quien confesó que no pensaba volver a salir. Su última participación en Carnaval había sido en 2019 con Zíngaros, la que no estuvo exenta de polémica por darse luego de que el mediático actor dejara a Los Muchachos, rival directo de Zíngaros.
En el mismo conjunto se da la vuelta de Walter Cucusú Brilka al Carnaval, y aunque no será la primera vez que salgan juntos, ya lo habían hecho en Los Muchachos en 2014, sí será la primera vez que hagan un trío humorístico con Pedro Cacho Denis, que vuelve al parodismo tras un año en la revista House.
Otra vuelta que genera expectativa es la de una de las mejores voces del carnaval: Miguel Villalba. Tras el segundo premio de 2020 con su conjunto Nazarenos, Villalba no había vuelto a los tablados, hasta este año que saldrá a escena al cumplir 50 años de Carnaval y lo hace con una sola condición: “Yo les dije que salía, pero si Horacio (Rubino) se subía al escenario”, comentó.
Horacio Rubino, que se había despedido de los escenarios, aceptó el reto y comenzó a ensayar con su conjunto una vez más como componente, además de como director y libretista. “En realidad más que un regreso, lo mío es una salida transitoria del retiro”, aclara Rubino y manifiesta que solo sale por pedido de Villalba, quien también se despedirá de los escenarios en este Carnaval.
Fabián Vilalba es otro de los regresos al Carnaval tras participar por última vez en 2020 con Nazarenos. Este año lo hará en la revista Tabú, ganadora del último certamen.
En murgas, por su parte, se destaca la vuelta de Luis Canario Pereira, una de las voces más reconocidas de nuestro Carnaval, principalmente por sus participaciones en La Reina de la Teja y Zíngaros.
Pereira había salido por última vez en 2020 en la revista House, tras 11 temporadas en Zíngaros. Su último Carnaval en murgas había sido en 2008, con Momolandia. “Es como volver a aprender a cantar murga”, confiesa el veterano murguista.
“Yo empecé en 2009 con Zíngaros y los ritmos y tiempos para cantar son muy distintos”, confiesa el Canario, que, entre otras cosas, tiene en sus hombros la responsabilidad de cantar la canción final de Curtidores en esta temporada.
Fuente: Montevideo Portal